sábado, 19 de julio de 2014

HACIA EL OLIMPO EN SILENCIO


Rafael Mingo

Uno de mis principales empeños, en estos momentos de mi vida, es comprender y entender a las personas de distintas cualidades con respecto a la “normalidad”. Hay una persona especial con la que he congeniado y nuestro entendimiento mutuo es asombroso. Se trata de Sergi Castell, un chico educado, honesto y sensible, creativo; un luchador infatigable, deportista y ganador. ¡Ah, se me olvidaba! Y autista.



Sergi tiene una madre coraje y un padre enamorado de su hijo. Un día, entre los tres y cuatro años, estos padres le llevaron a la piscina. Querían que su hijo hiciera natación. Sergi se agarraba con increíble fuerza a las piernas de su madre, aterrorizado por el líquido elemento; le resultaba imposible entrar a la piscina.



Con paciencia y sabiduría, Esther Santos allanó el camino, logrando que Sergi aceptara entrar en la piscina. Sus primeras brazadas, sus primeros “pinitos” dentro del agua comenzaron a dar sus frutos. El pequeño Sergi fue cogiendo confianza y estabilidad. Sin saberlo, comenzaba la forja de un futuro campeón.



Padres coraje como los de Sergi son los que esta sociedad necesita. Le están dando, dentro de sus posibilidades, todas las herramientas necesarias para que el joven se interrelacione con la sociedad normalizada al mismo tiempo que le preparan para la vida adulta, respetando sus diferencias, logrando su autonomía personal y social a través del lenguaje y las habilidades sociales. El trabajo, puede imaginarlo cualquiera, no es sencillo.



Puede parecer una comparación atrevida, pero en absoluto lo es si se analiza detenidamente: Rafael Nadal, gran campeón, (¿el mejor deportista español de todos los tiempos?) luchador, humilde, sacrificado, competitivo, respetuoso… todas las cualidades de un campeón y un ejemplo para el deporte normalizado. Sergi Castell, un ejemplo para el deporte adaptado, para la natación adaptada especialmente.



Aprendió a hablar con inmensos sacrificios (sepan que el 50% de los autistas no hablan) y poco a poco está logrando la inclusión entre el mundo normalizado, el cual le resulta esquivo, árido, difícil y extraño. No entiende por qué “chillan”, por qué aplauden y escuchan la música tan fuerte. A Sergi, como a cualquier autista, le molestan los ruidos, las aglomeraciones, los ambientes y lugares desconocidos. Pues bien: todo esto lo ha superado recientemente en el Campeonato Nacional de Natación Adaptada, donde además, ha sido el único participante autista de toda España. Puestos a valorar la cuestión en profundidad, además ha tenido que competir con todos los nadadores con discapacidad física (y no psíquica, como él). Supone una dificultad añadida evidente que ha mermado el resultado final: las reacciones, la concentración y la atención, son antagónicas. A ellos no les afecta de igual modo el sonido que da la salida, ni los vítores o aplausos del público; se adaptan mejor al hecho de encontrarse con una piscina descubierta (cuando Sergi está acostumbrado a entrenar todos los días en piscina cubierta) o no dependen tanto del tipo de juez que dé la salida… por poner unos pocos ejemplos.



Sergi, has demostrado que la discapacidad no es un impedimento para progresar. El esfuerzo, la capacidad de concentración, el sacrificio, la atención, el espíritu de lucha, las ganas de ser campeón, la disciplina, el orden, hacen de ti un ser especial, único e irrepetible. Eres un ejemplo vivo para toda la sociedad, un luchador nato que demuestras con tu actitud que todo se puede lograr. Por eso, un día entrarás en el Olimpo, en lo más alto, así como tú eres: sin hacer ruido, en silencio, como entran los verdaderos campeones.



Tu ejemplo es una lección magistral de la que el grupo de trabajo está muy orgulloso: tus padres, tus abuelos, los voluntarios, tus profesores, los que creen en ti (no aquellos que, tal vez por ignorancia, no confiaron), tu actual entrenador… todos estamos contentos y felices y esperamos que tu ejemplo se extienda por todo el mundo y se te respete por lo que eres, por quien eres. También a todos los seres humanos que, como tú, tienen una discapacidad y luchan por demostrar lo que son.

Sergi, lo tuyo en el Campeonato de España ha sido INSUPERABLE.




3 comentarios:

  1. Me encanto leerlo...todo un ejemplo Sergi...y tu también al difundir estas noticias positivas en medio de tantas noticias negativas...un canto a la vida bien narrado y muy emotivo...
    Un abrazo...

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    1. Realmente lo de Sergi ha colmado todas mis estectátivas. Tiene una mente fabulosa y un poder interno increíble. Se merece todo.

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  2. ¡¡¡¡Qué historia !!!
    Es emocionante. Sin conocer a Sergi, ya se siente amor por él.
    Lo cuentas muy bien, aunque la realidad sugiere las palabras, sólo quien lo conoce desde dentro puede transmitir y hacer vivir esta historia. Gracias por compartirla.
    Un abrazo
    Rosi

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